Tenemos alma teleco. Y es que el 60% de los ingenieros que forman parte del equipo humano de R se graduaron en la Escola de Enxeñaría de Telecomunicación (ETT) de Vigo. Para que te hagas una idea, a lo largo de estos años, más de 100 estudiantes de la EET aportaron todo su talento al proyecto tecnológico de R.
Y esa relación entre R y la Escola de Enxeñaría de Telecomunicación sigue más viva que nunca. Porque son muchos los retos que tenemos por delante: ciberseguridad, Internet de las Cosas o la era 6G.
Nos lo cuenta Rebeca Díaz, directora de la Escola de Enxeñaría de Telecomunicación (ETT) de Vigo.
La transformación digital ha disparado la demanda de perfiles telecos
El 95% de los egresados del Grado en Enxeñaría de Tecnoloxías de Telecomunicación están trabajando. Un éxito que, para su directora, se debe en parte al carácter práctico de esta formación: “El 50% de su tiempo de estudio se centra en el trabajo en laboratorios y en el desarrollo de proyectos”.
Y esto permite que los estudiantes tengan perfiles muy versátiles para incorporarse en cualquier empresa TIC: “No sólo entienden y aplican las tecnologías más novedosas, sino que, además, son capaces de actualizarse rápidamente a la vertiginosa evolución de las tecnologías en nuestro sector”.
Una transformación digital que aceleró la pandemia, como apunta Rebeca Díaz: “Ha provocado que la sociedad sea más consciente que nunca de su dependencia de los sistemas de información y la comunicación a distancia. El adjetivo ‘telemático’ y las tecnologías TIC (información y comunicaciones) se han convertido en términos familiares en nuestras vidas, dado que se aplican de forma transversal a todos los ámbitos económicos. De ahí que nuestros/as titulados/as tengan tanta demanda en cualquier sector”.
¿Y cuál es esa demanda?
La directora de la Escuela reconoce que se les suele asociar al ámbito Telco (operadoras y proveedoras de servicios), pero hay mucho más: “El comercio electrónico y la logística, soluciones de electrónica, soluciones de automática, gestión de sistemas informáticos, Internet de las Cosas, ciberseguridad y privacidad en soluciones informáticas, procesamiento de imagen y sonido, tecnologías cuánticas, inteligencia artificial y comunicaciones satelitales, etc.”
Pero también en los ámbitos emergentes, donde “las personas que formamos en nuestra escuela van a tener un papel muy relevante”.
Hablamos de:
- “Las tecnologías cuánticas que modificarán sustancialmente el ámbito TIC, tanto para la computación como para las comunicaciones y criptografía”.
- “Las nuevas tecnologías para la comunicación móvil -ya se está hablando de la era 6G-, que permiten mayores velocidades, menores latencias y dibujar nuevos escenarios en múltiples sectores, como el industrial o el médico. Este soporte tecnológico permitirá que el Internet de la Cosas se generalice más allá del ámbito del hogar, para conseguir soluciones para industria, para ciudades o para redes estratégicas, como la Smart Grid”.
- “La optimización de procesos relacionados con el intercambio de información y su procesamiento, para dotar a los sistemas de cómputo de capacidad de aprendizaje (lo que popularmente se conoce como Inteligencia Artificial), usando grandes volúmenes de datos, y permitiendo autonomía en las decisiones. Es lo que se usa, por ejemplo, en los vehículos autónomos”.
- “La aplicación de tecnologías de realidad aumentada para conseguir que la experiencia de comunicación para ocio y trabajo sea más amigable y cercana”.
El reto de la ciberseguridad
La Escola de Enxeñaría de Telecomunicación (ETT) de Vigo colabora en la Cátedra R en Ciberseguridade, junto con la Universidade da Coruña.
Una especialización de futuro para los estudiantes: “Ahora es una necesidad para muchas empresas, pero disponer de perfiles formados en el ámbito de la ciberseguridad será imprescindible para cualquier actividad empresarial a corto y medio plazo”, asegura Rebeca Díaz.
Mitos que derribar
Que si es una carrera muy difícil, que si la nota de corte es alta dispara el interés... Son esos mitos que prevalecen a lo largo de los años y hay que romper.
La directora de la Escuela asegura que “nuestras tasas de éxito académico son equiparables a las de otras titulaciones y, especialmente en los dos últimos cursos de especialización: casi un 90% del alumnado supera las materias sin incidencias ni retrasos”.
Y algo muy importante: “El alumnado pre-universitario y las personas de su entorno de influencia (familias, docentes…) deberían prestar atención a los intereses personales del estudiante, por supuesto, y después mucha atención a la proyección laboral tras los estudios”.
Y fomentar la presencia femenina en las aulas
El porcentaje de mujeres se sitúa en torno al 23% del alumnado del grado. Algo preocupante para Rebeca Díaz y que sucede recurrentemente en el ámbito STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).
Por eso, ella colabora en varios programas que trabajan con alumnado de primaria para tratar de visibilizar a referentes femeninas en el ámbito de la ingeniería. Además de las iniciativas que impulsa la Escuela, como talleres formativos para niñas y chicas.
Y es que las mujeres de la EET son un colectivo muy activo: “En el equipo de dirección somos cuatro mujeres y la delegación de estudiantes de la escuela está presidida por una mujer, por ejemplo”.
En su opinión es un problema que requiere del diseño de acciones globales: “Me apena ver que en ocasiones este tema se percibe como un problema de mujeres que debemos resolver las mujeres. En mi opinión, es un tema global, social, con implicaciones serias en la innovación y la investigación (que en muchos casos está sesgada por la perspectiva masculina)”.
Desde R seguiremos muy de cerca los pasos de la Escola de Enxeñaría de Telecomunicación de Vigo. Y continuamos trabajando mano a mano para seguir tendiendo puentes de unión entre empresa y universidad.
Muchas gracias, Rebeca Díaz, por esta charla. Os deseamos muchos éxitos.