La era de la Inteligencia Artificial ha llegado para quedarse y, poco a poco, se va asentando en muchos sectores.
Por su parte, el mundo financiero siempre se ha caracterizado por su continua necesidad de renovación y de adaptación (a cambios, nuevas realidades y demandas sociales), e incluso de anticiparse al futuro. En este contexto, es lógico que las entidades financieras vean en las soluciones de Inteligencia Artificial una herramienta fundamental para actualizar y optimizar sus actividades sin perder de vista lo esencial: la atención al cliente.
En su día a día, al sector bancario le toca gestionar el riesgo de los préstamos, su precio, estimar el impacto de un impago y la propia relación con el cliente, tareas especialmente difíciles antes, durante y después de cada crisis y que, en un contexto como el actual, requieren especial atención. Además, es un sector muy marcado por la regulación y por la creciente complejidad y sofisticación de sus operaciones.
Todo ello genera un entorno en el que la Inteligencia Artificial ha encontrado un terreno muy fértil para demostrar su capacidad de generar valor cuando se tienen los datos adecuados. Y son muchas las ventajas que la IA puede aportar a las entidades bancarias:
Concesión de créditos: sencillamente, el que tiene los mejores modelos es el que gana, por lo que las entidades utilizan la Inteligencia Artificial para predecir las previsiones de pérdidas y ganancias. La IA permite construir modelos que estimen la probabilidad de impago y la severidad de las pérdidas de los préstamos solicitados, ajustando el precio en función del nivel de riesgo.
Gestión de liquidez: los servicios de Inteligencia Artificial permiten predecir el volumen de solicitudes de nuevos préstamos, la velocidad de amortización anticipada e incluso pronosticar las necesidades de efectivo de cada cajero y sucursal para los siguientes días o semanas.
Lucha contra el crimen financiero: los patrones elaborados usando soluciones basadas en Inteligencia Artificial permiten a los bancos detectar actividades sospechosas con mayor anticipación y precisión, lo que evita un evidente impacto económico y también de reputación frente a los clientes.
Marketing y experiencia de cliente: Los bancos necesitan conocer cuáles de sus potenciales clientes pueden convertirse en los más beneficiosos y, por contra, cuáles son los más susceptibles de causar baja. Los servicios de Inteligencia Artificial permiten optimizar los datos que conocemos de nuestros clientes y así podemos ofrecerles una atención más personalizada y ajustada a sus necesidades concretas; en definitiva, fidelizar al cliente a partir de un trato cercano y personalizado. Porque los clientes esperan que los bancos sepan quiénes son, qué necesitan y cuándo lo necesitan. Gracias a la gran información, la Inteligencia Artificial ayuda a predecir las necesidades y a anticiparse a las necesidades futuras, tanto las de los clientes como las del conjunto del sector financiero y también las de la propia entidad.
Mercados globales: los agentes bursátiles necesitan elegir la mejor alternativa para el enrutado de operaciones y su estrategia de ejecución, y han encontrado en los modelos de trading algorítmico una eficaz herramienta para analizar cuál es la opción que minimiza el impacto de sus operaciones en el mercado, sin olvidar los costes, ajustándose a las normativas vigentes y, por supuesto, sin descuidar la atención al cliente.
El sector financiero ya está recogiendo las potencialidades de las soluciones de Inteligencia Artificial e introduciéndolas en cada vez más áreas de su organización, pues son conscientes de que aquellos que pierdan este tren se mostrarán cada vez menos competitivos e incluso podrían ser expulsados del mercado.
Las cuatro fases de la Inteligencia Artificial explicadas por BAI Analytics
En R somos conocedores de las muchas ventajas que puede aportar la Inteligencia Artificial aplicada a vuestras empresas. Nuestro equipo especializado en Inteligencia Artificial, BAI Analytics, considera que existen cuatro fases específicas de madurez necesarias para que implantéis con éxito proyectos de Inteligencia Artificial: aceleración de soluciones, productividad de los científicos de datos, democratización de la ciencia de datos y empresa impulsada por la Inteligencia Artificial.
Aplicado al sector bancario, el aprendizaje automático ayuda a los bancos a desarrollar e implantar soluciones de Inteligencia Artificial a mayor velocidad y a dar respuesta a una mayor cantidad y variedad de demandas. Progresivamente, las propias entidades bancarias aprenden a aprovechar sus conocimientos y los datos integrados en sus funciones y líneas de negocio hasta convertirse en auténticos expertos capaces de desarrollar estrategias para productos, canales y experiencia del cliente en torno a la Inteligencia Artificial.
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En R podemos ayudarte a implantar con éxito servicios de Inteligencia Artificial en tu institución financiera, sea cual sea su tamaño o el grado de madurez de sus datos. Con el apoyo de BAI Analytics aumentarás tu sofisticación en data y analytics de modo que podrás aprovechar tus datos y ventajas competitivas para aumentar la eficiencia operativa y dar un mejor servicio a los clientes.