Una de las preocupaciones más importantes de una empresa es entender a su cliente para poder llegar a él y satisfacer sus necesidades. Antes de establecer ninguna estrategia es necesario definir a quién va dirigida y para ello debes concretar a tu buyer persona.
Pero… ¿qué es un buyer persona?
Un buyer persona es una representación de tu cliente final que se construye a partir de sus datos demográficos, personales, laborales y objetivos que tiene marcados.
Una vez recopilados todos estos datos debes analizarlos para obtener el perfil de tu buyer persona, en ocasiones una empresa puede tener más de un tipo de buyer persona.
¿Cómo definir a tu buyer persona?
Antes de definir tu buyer persona tienes que recopilar mucha información que necesitas poner en orden y para ello lo más recomendable es que desarrolles tu método propio adaptándolo a los objetivos de tu empresa combinándolo con la necesidad de conocer las necesidades de tus potenciales clientes.
Para recoger la información necesaria para tu buyer persona el método más adecuado es la encuesta o entrevista a clientes actuales y potenciales clientes y, a partir de esta información, podrás organizar una base de datos con los siguientes contenidos:
- Nombre, apellidos y datos biográficos
- Datos laborales
- Necesidades y motivaciones relacionadas con tu sector
- Objetivo que busca el cliente en tu producto o servicio
- Limitaciones que el cliente encuentra en tu producto o servicio
Estrategia
Al finalizar la recogida de información puedes comenzar a realizar el análisis de los datos para segmentar tus buyer personas y definir las necesidades de cada uno.
Con los resultados obtenidos puedes definir tu estrategia de marketing y también la de comunicación porque toda esta información también te ayudará a la hora de definir tu calendario editorial en tu blog, redes sociales y diferentes canales de comunicación.
Es decir, no es lo mismo que tu cliente tipo sea un millennial, que alguien con hijos o bien de una zona geográfica concreta. A partir de ahí tienes que pensar en sus intereses, en qué tipo de mensajes les gustan y pensar siempre en él. Recuerda que el que mucho abarca poco aprieta, así que mejor centrar siempre el tiro .
¡Hasta la próxima!
Imagen de Clem Onojeghuo