Hablamos con Roberto Romero, tecnólogo especialista en Metaverso, que recientemente ha participado en las Xornadas Tecnolóxicas "Tu futuro lo decides hoy". Con él repasamos las oportunidades potenciales de este fenómeno virtual que ya está revolucionando el universo de las telecomunicaciones.
Para contextualizar, ¿qué es el Metaverso y cuáles son sus claves?
R.R.: El Metaverso es la siguiente gran revolución de las redes de telecomunicación globales. Propone un internet espacialmente organizado basado en estándares y todo ello dispuesto alrededor del usuario como centro de la propia red. Por lo tanto, el cambio de cualquier marca o compañía con su audiencia es total desde la captación, la interacción y la proposición de contenido interactivo y genera tanto engagement como retención. Así como, cuando llegaron las redes sociales, hubo un cambio en el comportamiento de las marcas con los usuarios que ahora tenían la capacidad de añadir contenido a la red, ahora los usuarios son habitantes reales de la red, transaccionan con criptomonedas y poseen contenidos digitales. Es un cambio de paradigma.
En concreto, ¿cómo serán las empresas del Metaverso?
R.R.: Como ahora, pero más eficientes y sacando un provecho aún mayor de la tecnología. En el fondo todo gira alrededor del conocimiento de la tecnología y de entender cómo la tecnología ha cambiado, está cambiando y cambiará nuestra relación con la empresa, con los empleados y con los clientes.
¿Estamos ante una nueva era en la forma de interactuar y relacionarnos con los clientes?
R.R.: Absolutamente, obviamente el target objetivo está siendo en gran parte la generación Z, pero es algo que nos va a afectar a todos los sectores, industrias y usuarios del actual internet, transformando nuestros espacios de educación, de trabajo, de compras, etc… Es un gran cambio que veremos, sin embargo, que aterriza poco a poco, como una evolución de lo que ya había hacia lo que visionamos que vendrá.
¿Dónde crees que están las mayores potencialidades del Metaverso? ¿Y sus riesgos?
R.R.: El riesgo es no entender para ir progresivamente adoptando las nuevas fórmulas y generar valor alrededor de todas estas posibilidades. La potencialidad está en que no será algo que surgirá de un día para otro, es una evolución de lo que ya conocemos que va a seguir alterando nuestras herramientas para hacernos más eficientes, más sostenibles, más éticos y reducir la brecha en la capacidad de aprovechar oportunidades.
Como empresa, ¿cómo me inicio en el Metaverso?
R.R.: Lo primordial es apoyarse en la figura de los expertos que pueden trazar un camino a partir de una visión. En mi opinión, esto no va de sacar una nota de prensa; la oportunidad está en entender qué tecnologías se ponen a disposición y pueden alterar mis prioridades y activar nuevos recursos desde la contratación, la formación, la operación y los servicios que ofrezco a cliente, tanto externo como interno.
Algún caso de éxito de empresa que ya ha sabido aprovechar las potencialidades de este nuevo mundo virtual.
R.R.: 30 millones de usuarios diarios en plataformas como Fortnite; más de 50 en Roblox; más de 31 factorías de BMW en entornos de gemelos digitales; Accenture reparte 120.000 Oculus Quest a sus nuevos empleados para realizar el onboarding en la compañía.
En 2020 se transaccionaron en entornos virtuales 54 billion USD; el mercado de los NFT en 2021 fue de 41 billion USD; los usuarios de entre 10 y 20 años suponen el 38% de los usuarios totales de la red seguido por el 36% de 21 a 35 años y un 22% de 36 a 50.
¿Nos lleva el Metaverso hacia un mundo más sostenible y responsable?
R.R.: Es parte de la idea. Para todo ello necesitamos los estándares que eleven esta nueva red a un nivel en el que todos formemos parte de ella. El nuevo rediseño de la red traerá sostenibilidad y ética desde el core del diseño de la red, con el usuario como pieza fundamental que tendrá la capacidad de decidir cúal es su papel en la red y cómo transacciona con los datos y la privacidad. Asistiremos a una nueva forma de consumir contenidos en plataformas de hardware nuevas y el mercado tenderá a resolver conflictos actuales que afectan a la cadena de suministros, a las leyes de regulación y poco a poco entenderemos que la evolución no es más que ponerle sentido común.
Quizá el problema ahora mismo es que hay una capa de ruido enorme que hace muy difícil separar el grano de la paja, pero seguiremos avanzando muchísimo en los próximos 3 a 5 años y muchas incógnitas se disiparán.
Cuando hablamos de temas tan innovadores como el Metaverso, suelen surgir dudas sobre la privacidad de los datos y la necesidad de regulación, ¿cómo se están abordando estos aspectos?
R.R.: La blockchain es una tecnología realmente alucinante y flexible. La estandarización de estas redes sobre la blockchain nos permitirá crear una capa de seguridad sobre transacciones y dar el poder a los usuarios, para que decidan cómo y con quién comparten sus datos y su privacidad. También para identificar a los usuarios reales detrás de una cuenta con un ID que me acredite como persona física legalmente y pueda habitar estos espacios de la red del Metaverso con la seguridad necesaria.
El tema de las criptomonedas está viviendo una burbuja de especulación, pero que poco a poco se irá regulando dejando paso a una visión mucho más holística que propondrá diferentes productos y servicios. Ahora estamos solo tocando la superficie.
Actualmente contamos con diversas tecnologías -en muchas de ellas trabajamos activamente en R- que ganan importancia cada día en una sociedad digitalizada, como la Inteligencia Artificial, la tecnología 5G, la nube, el Big Data, ¿cómo pueden interactuar o apoyarse en el Metaverso?
Hablamos de diferentes tecnologías habilitadoras como el 5G, la IA, el Edge Computing, los visores de hardware de realidad aumentada y virtual, la blockchain, el internet of things… tecnologías que llegaron poco a poco los últimos 20 años y que hoy se alinean para hablarse entre todas ellas y poder construir un internet tangible y sostenible, donde los asistentes de voz cobran protagonismo, la inteligencia artificial nos permite hacer más con menos al optimizar los procesos a través de machine learning, incluso a crear contenido de forma automática con algoritmos avanzados como Dalle-2. El futuro de los visores de realidad mixta que llegarán a sustituir a los smartphones es espectacular.