La ‘Cunchiña’, la mascota del Xacobeo 21-22, llega este domingo a Compostela después de acompañar al líder de La Vuelta en cada etapa. Si quieres emular a estos grandes del ciclismo, prepárate para hacer el Camino de Santiago en bici. Pero antes de lanzarte a lo loco, sigue estas recomendaciones.
Septiembre es la mejor época del año para quien decide hacer el Camino en bici. Piensa que el calor ya no aprieta tanto y los días siguen siendo bastante largos.
Planifica cada etapa antes de iniciar el Camino
Para solicitar la Compostela en la Oficina del Peregrino debes tener en cuenta que has de recorrer 200 km. Así que, con esto en mente, planifica cada una de las etapas de tu ruta y personalízalas para adaptarlas a tu forma física y objetivos.
Se recomienda establecer etapas de entre 60 y 100 km. Para que te hagas una idea, a pie se hace una media de 4 o 5 km por hora y en bici unos 12 o 13 km; por lo que en 5 horas recorrerás alrededor de 60 km.
Organiza bien las pernoctas. Si vas a dormir en los albergues públicos, los peregrinos de a pie tienen preferencia sobre los ciclistas hasta las 20:00 h.
Márcate descansos a lo largo de la jornada. Al ir en bicicleta serán poco frecuentes y de corta duración. Eso sí, aprovecha para conocer lugares de interés próximos a tu ruta. Y ojo, para siempre fuera de la carretera y del arcén.
Y si bien es cierto que lo más bonito es ir por los caminos más rurales y por las sendas propias del Camino, si en algún tramo no das más de ti, busca un plan B por carretera para que el recorrido no sea tan exigente.
Finalmente, piensa qué vas a hacer con la bici al llegar a Santiago. Puedes enviarla a casa por Correos o volver en tren, donde hay ya zonas específicas habilitadas.
Extrema la precaución
En la bici, siempre con ‘sentidiño’. Guárdate estas recomendaciones:
- Intenta ir acompañado.
- Ten mucho cuidado con el tráfico y con los peregrinos que van a pie.
- Guarda siempre las normas de circulación: ve en fila y con el equipamiento de seguridad que marca la normativa.
- Revisa bien la bicicleta, especialmente las ruedas, antes de cada etapa.
- Lleva alguna cámara de repuesto o un kit antipinchazos, por si estás en medio de la nada o es festivo y no hay ningún taller abierto.
Y no olvides que puedes llamar al teléfono gratuito 112 para cualquier emergencia.
Entrena con antelación
Nada de hacer el cabra para fardar en tus apps móviles para ciclistas. Esto no es una carrera y el entrenamiento previo te puede salvar de alguna lesión.
Lo ideal sería que te preparases durante un par de meses para que puedas ir superándote de forma gradual.
Empieza por terrenos llanos, y poco a poco altérnalos con subidas; así podrás determinar el desarrollo del plato y piñones más adecuado.
Y ya durante los últimos días de entrenamiento, empieza a meter peso. Incorpora alforjas cargadas a los recorridos diarios para ir acostumbrándote a la carga y al volumen y mantener la estabilidad. De todos modos, intenta llevar solo lo imprescindible.
Y el mejor consejo: ¡disfruta el Camino!
Cuéntanos, ¿has peregrinado alguna vez a Santiago en bici?
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